Antes de terminar el año 2022 el Consejo de Ciudad ha vuelto a celebrar su plenario. Más de setenta asistentes han llenado el Saló de Cent en un encuentro donde ha destacado la aprobación de dictámenes y recomendaciones sobre los Presupuestos Municipales y las Ordenanzas Fiscales para 2023, la atención integrada a las personas en los ámbitos sanitario, social y habitacional, así como el relativo al comercio electrónico y el impacto sobre la movilidad y sostenibilidad.

El concejal de participación Marc Serra ha dado la bienvenida al acto recordando a Joan Bordetas, fallecido en agosto después de una enfermedad. Miembro de la comisión permanente del Consejo de Ciudad y medalla de honor de la ciudad, Bordetas destacó por su “capacidad de llegar a acuerdos que reflejan la pluralidad de la ciudad, de escuchar, de entenderse y ser capaces de trabajar por el bien común”, ha subrayado Serra.

Marc Serra, presidint el Plenari de desembre

Valoración positiva de unos presupuestos «expansivos y sociales»

Montse Morera, vicepresidenta del Consejo de Ciudad y representante del Consejo de Asociaciones de Barcelona (CAB), presentó el dictamen sobre los Presupuestos Municipales y las Ordenanzas Fiscales 2023, que fue aprobado por la mayoría del plenario. Ha compartido las reflexiones del grupo de trabajo, que ha calificado los presupuestos como «expansivos y sociales», haciendo énfasis en la ampliación de 1.000 millones de euros desde 2019 y se contempla un «aumento significativo del gasto e inversión en transporte público”, ha señalado.

Morera también ha valorado muy positivamente la inclusión de propuestas hechas desde el Consejo, especialmente la mejora de la transparencia en relación al posicionamiento de los grupos de la oposición. Entre la decena de recomendaciones incluidas en el dictamen destacan la necesidad de expresar a qué se destinan los recursos recaudados a través de la tasa turística, la presentación de los resultados del proyecto piloto de la Tarifa Plana a los tributos, el adelanto en un modelo de subvenciones plurianuales o la eliminación de la bonificación de las tasas de las terrazas.

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La atención integrada en primer plano

Fruto del dictamen Barcelona pospandemia, el Consejo de Ciudad ha iniciado un grupo de trabajo sobre la atención integrada. Un espacio que a lo largo de 6 meses ha reflexionado en profundidad sobre la salud, el bienestar y la atención a las personas en la ciudad de Barcelona, un trabajo que se ha recogido en el dictamen presentado por Àngels Guiteras.

La propuesta plantea realizar un seguimiento permanente de la cuestión, mediante un grupo permanente del Consejo de Ciudad o bien a partir de la creación del Consejo Municipal de Atención Integrada, y apuesta por implementar una atención centrada en los derechos de las personas. En cuanto a la gobernanza, plantea aplicar las normativas actuales e impulsar un marco normativo que favorezca el diseño, despliegue y evaluación de la atención integrada. Recomienda también ampliar los espacios de participación para introducir este nuevo modelo y evitar el establecimiento de jerarquías para crear redes horizontales de intervención.

El impacto del comercio electrónico en la ciudad

La aparición en los últimos años del comercio electrónico ha tenido un gran impacto en la ciudad. Su complejidad y necesidades derivadas de la distribución de las mercancías han motivado la reflexión del Consejo, que se concreta en el dictamen específico presentado al plenario. Juanjo Casado, representante de UGT, ha felicitado al consistorio por incluir algunas de las recomendaciones hechas por el grupo de trabajo en el Pacto para la movilidad. Un documento que es el fruto de «mucho trabajo y es lo suficientemente importante para continuar trabajando y proponiendo más cosas concretas», ha explicado.

Las recomendaciones trasladadas al gobierno municipal a través del dictamen aconsejan medidas ambientales como la priorización de puntos de distribución colectiva, los apoyos a la reconversión de flotas de vehículos de cero emisiones y también insta a la Agencia de Salud Pública de Barcelona a analizar el impacto en la salud de la movilidad asociada al e-comercio, así como la preservación del espacio público.

En el ámbito económico, el dictamen apuesta por reforzar el papel del comercio local y poner la lupa en las condiciones de las personas profesionales de la distribución, garantizando unas ocupaciones de calidad y minimizando los riesgos laborales.

Facilitar la accesibilidad a la administración pública

La representante de la Taula d’Entitats del Tercer Sector Social de Catalunya, Xènia Carné, y Jordi Romero en nombre de la Federación de Asociaciones de Personas Mayores de Cataluña han presentado al plenario la propuesta de adhesión al Manifiesto de las Jornadas sobre Dificultad de Accesibilidad en la Administración Pública. Un documento que se ha valorado en la línea de lo que la Comisión Permanente del Consejo de Ciudad ha captado en los últimos meses: “las dificultades que se encuentra la población en general, pero más específicamente los colectivos más vulnerables, para acceder a la administración”, han explicado.

Después de jornadas de trabajo del grupo y la organización de un foro abierto a la ciudadanía, el grupo ha presentado una serie de exigencias y recomendaciones -aprobadas de forma unánime- que la administración pública debería tener en cuenta, como por ejemplo garantizar el derecho a una buena administración, sin discriminaciones en el acceso y que mantuviera el derecho a no relacionarse con él digitalmente, manteniendo la presencialidad, si así se desea.

Fortalecer la participación

Una vez aprobados los tres dictámenes, el plenario del Consejo de Ciudad ha acordado designar a Carme Panchón y Enric Canet como representantes del consejo en la Comisión de Amparo. Elisenda Roca y Juan Cabanas han sido elegidos a su vez como miembros delegados en la Comisión Asesora de Procesos Participativos. Ambas comisiones son órganos de garantía por el buen funcionamiento de participación de la ciudad.

La última votación del plenario la ha protagonizado el documento de reflexiones y recomendaciones en torno a los compromisos y experiencias de la Mesa por una Noche Cívica y Segura. Un documento que ha sido aprobado pese a reconocer que parte de una baja participación de entidades juveniles, se ha querido reivindicar el tejido asociativo que se estructura en torno a las fiestas mayores y se ha apostado por una mirada crítica: apostar por espacios de ocio alternativo y desestigmatizar a la población juvenil en los medios.